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      Donde hay argentinos siempre hay banderazo y la glamorosa Montecarlo no fue la excepción: “¡Qué de la mano de Colapinto, todos la vuelta vamos a dar!”

      • El encuentro estaba planificado para un rato antes del GP de Mónaco, pero se canceló.
      • Ya con la carrera terminada y en forma espontánea, la barra albiceleste se hizo escuchar.

      Donde hay argentinos siempre hay banderazo y la glamorosa Montecarlo no fue la excepción: “¡Qué de la mano de Colapinto, todos la vuelta vamos a dar!”Los argentinos le pusieron color y calor a la segunda presentación de Colapinto, que terminó 13° en el GP de Mónaco. Foto: Instagram

      El banderazo estaba previsto para las 12:30 en la Rue Grimaldi, cerca de la primera curva del circuito, y un par de horas antes que los autos de Fórmula 1 rugieran por la calles de Montecarlo. Pero la ansiedad de muchos conspiró con la idea original de agrupar compatriotas para hacerse escuchar en medio de la prolijidad y la elegancia de las calles monegascas.

      Lo que estaba previsto, bien en modo argentino, no se concretó. Sin embargo, al final y de manera espontánea, se hizo realidad. El esperado encuentro se llevó a cabo después de una competencia que tuvo final feliz para Franco Colapinto. Es que no solo completó el recorrido con ese Alpine que lo hace renegar, sino que trepó cinco peldaños y, tras largar 18°, llegó en el 13° lugar.

      “¡Qué de la mano de Colapinto, todos la vuelta vamos a dar!”, era la canción que se escuchaba cada vez con más fuerza a la salida de la competencia. Los compatriotas se juntaron imprevistamente y, poco a poco, se dieron “manija” para saltar y cantar, en medio de banderas y camisetas número 10 de Lionel Messi.

      Colapinto y su paso por el Puente Hércules. Foto: APColapinto y su paso por el Puente Hércules. Foto: AP

      La mayoría sacaba fotos con los celulares, asombrados por el espectáculo que brindaban los argentinos en medio de la calle. Mientras tanto, en las tribunas, los asistentes invitaban al público a abandonar las gradas, casi al mismo tiempo que el personal de limpieza las dejaba en condiciones para el desarmado.

      Otros auxiliares recorrían las tribunas para recoger las almohadillas para sentarse que los espectadores devolvían amablemente. Y la Policía conducía a la masa rumbo a la estación de trenes, para dividir a los pasajeros de Niza y de Mentón.

      El Fan Zone continuó con sus espectáculos hasta la noche, mientras que el tránsito, ya para las 19:30, circulaba sin inconvenientes por donde unas horas antes Norris se defendía de Leclerc y Verstappen y Colapinto se armaba de experiencia en esta segunda oportunidad en la Fórmula 1.


      Sobre la firma

      Roberto Berasategui

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