Un imán que dice "We should all be feminist" ("Todas deberíamos ser feministas") y otro de Harry Potter en la heladera; muebles comprados en el mercado de pulgas; unas zapatillas para ir al gimnasio; un escritorio preparado para streamear; un aro de luz; y muchos, muchísimos serums, tónicos, cremas y otros productos más o menos extravagantes.
Es la oficina donde Clarín encontró a Daniela López. "Dadatina", para las casi 500 mil personas que la siguen en Instagram, con el objetivo de aprender a cuidarse la piel de una manera fácil y accesible. O, por lo menos, eso era al principio.
"Dada" (apodo de la infancia que le debe a su hermano) se convirtió rápidamente en la máxima referente del skincare en el país. En solo dos años, pasó de hacer reseñas para un par de amigas, a incursionar en Twitch, grabar podcasts, analizar rutinas de famosos en YouTube, tener su propia línea de productos, asesorar a empresas y hasta escribir un libro.

En 2020, se llevó el premio de "Instagramer del año" otorgado por Ciudad Magazine. Entre sus followers están las escritoras Camila Sosa Villada y Tamara Tenenbaum; la periodista feminista Luciana Peker; Paulina Cocina; y la cantante argentina más escuchada actualmente, María Becerra.
Para entender su éxito -una mezcla de azar y destino-, hay que remontarse un poco en el tiempo a algunos hitos. A cuando tenía 25 años y le dijeron que no podría usar ningún producto facial tras un diagnóstico de rosácea. A su primer "hilo" en Twitter -una plataforma que usa hace casi 14 años- donde dio indicaciones de cómo proteger la piel sin gastar mucha plata.
O al último, de hace unos meses, cuando abandonó su trabajo como instrumentadora quirúrgica, para dedicarse exclusivamente a la creación de contenido. Aunque, como ella dice, "ama los fierros" (es licenciada en Instrumentación quirúrgica, especializada en traumatología, ortopedia y artroscopia de rodilla y hombro), no se arrepiente de haber tomado este riesgo.
Todo lo que comparte lo respalda con investigación y estudios: es cosmetóloga profesional y realizó todo tipo de cursos (Cosmiatría, Dermaplaning, Química Cosmética Superior, Dermapen Superior, Biología de la Cosmética y Masaje con elementos, para enumerar algunos).

La apoyan las "soldadas" -el epíteto que inventó una de sus seguidoras y ahora caracteriza a la comunidad-. Ellas preguntan, aprenden, se dan consejos mutuos y hasta reclutaron "soldados": un universo de casi 20 mil hombres que replican las rutinas.
Con el "fenómeno Dadatina" (se sonroja al escuchar el término), surgieron emprendedoras que fabrican pads, vinchas, bolsos y fundas de almohadas. Es decir, se formó una verdadera red de contención, que llega hasta el aspecto económico, en un momento tan difícil como el actual.
Lo ha dicho y redicho: es orgullosamente feminista. Ve al skincare, antes que nada, como salud y cuidado. No menciona las marcas o productos que no le gustan -a menos que sean engañosos o peligrosos-, y privilegia las ofertas veganas y cruelty free.
En la "Dadacueva" (otro nombre inventado por sus seguidoras) habló de todo: desde sus influencers favoritos, pasando por su opinión sobre los rellenos y el bótox, hasta sus metas para el futuro.

- ¿Cómo empezó tu interés por el cuidado de la piel?
- Fue cuando me diagnosticaron rosácea, una afección de la piel que no tiene cura. La dermatóloga de ese momento me dijo "Nunca vas a poder usar ningún producto de cuidado, solo te podés lavar con jabón blanco". A mí no me cerraba.
Hay un meme en inglés que dice "No me gustan las cosas, me obsesiono" y eso es lo que me pasa a mí. Cuando empecé a hacerme conocida, me di cuenta de la responsabilidad que conlleva comunicar algo relacionado a la salud.
- ¿Cómo le explicás a la gente que el cuidado de la piel es un tema de salud?
- La piel es nuestro órgano más extenso y también el más expuesto; el que más daños externos recibe; la barrera de defensa de nuestro cuerpo. Una piel sana no es necesariamente una sin granitos o con "poros cerrados".
- ¿Hay un componente vanidoso también?
- Creo que eso tiene que ver con lo que vemos en la tele. Queremos esa piel lisa y perfecta, sin granitos, con un tono uniforme.

- "Pieles reales" es tu marca. ¿Cómo surgió?
- La idea se me ocurrió porque un montón de seguidoras me mandaban mensajes tristes y decepcionadas, porque su piel maquillada se veía como una puerta o porque usaban una crema y sentían que no les funcionaba o no les quedaba bien. Me mandaban fotos de referencias de celebridades con Photoshop o de publicidades editadísimas.
La realidad es que todo lo que consumimos tiene filtros, todo está súper procesado y editado. Con "pieles reales" quería exponer eso. Muestro, por ejemplo, las preproducciones de las fotos versus cómo quedan terminadas. O las fotos editadas que les sacan a las celebridades en la alfombra roja contra las que suben a sus propias redes, para enseñar que ellos y ellas también tienen poros, marcas, granitos y no hay que sentirse mal por eso.
Tenemos que preocuparnos porque nuestra piel esté saludable y aceptar que algunas cosas nos van a acompañar.
- ¿Cuál es tu relación con los filtros?
- Yo los abandoné a los dos o tres meses de haber empezado con mi cuenta. Nunca usé esos que te cambian la cara, pero hasta los de "colorcitos" que usaba me parecían medio engañosos. A veces me llegan comentarios del tipo "qué cara de cansada tenés": y no, no estoy cansada, es que no tengo filtro.
Me veo como me veo y me encanta. Es la vida real, es como somos. Me parece que si querés usar filtros está perfecto, mientras que no estés vendiendo algo, eso para mí es publicidad engañosa. A mí, en lo personal, no me suma.
- Están muy de moda los rellenos de ácido hialurónico y los llamados "retoques" no quirúrgicos. No solés hablar mucho de eso, ¿qué pensás?
- En general no hablo de bótox, rellenos y tratamientos estéticos porque prefiero tratar lo que es venta libre. Eso vendría a ser como un "extra". Siempre se puede elevar más la rutina, ya sea con la calidad de cremas, con tratamientos cosmetológicos, dermatológicos o incluso rellenos.
Si tenés ganas de hacértelos, está perfecto. En mi último podcast toqué este tema. Creo que hay que hablar también de los riesgos que pueden traer estos procedimientos. Es un tema tan complejo que no me entra en un post de Instagram. Tal vez en un futuro lo hable, desde otra plataforma, con algún profesional que haga estos tratamientos. Pero, por el momento, prefiero concentrarme en un cuidado integral accesible desde nuestras casas.
- Los tres "sí" y los tres "no" de Dada.
- Los tres sí: para la rutina, tener un buen limpiador, una crema y un protector solar, de factor 30 para arriba. ¿Los "no"">