Redacción Clarín
Ni una ni la otra. No hay que cumplir todas las fantasías ni deben morir… ¡Por favor que no mueran las fantasías! Estaríamos fritos si mueren las fantasías.
Las fantasías son imprescindibles, sobre todo para mantener interesante la relación de pareja. Todo se impulsa en la fantasía, allí nace la intención, nace el deseo. Si no hay fantasía, deseo, imaginación y creatividad en la cabeza, entonces el cuerpo tampoco va a responder a eso.
Es súper importante, pero no quiere decir que necesariamente tengamos que llevar a cabo todas las fantasías. Hay algunas cosas que se nos ocurren y podemos decir, “estaría bueno probar esta situación” o “¿por qué no experimentamos esta postura">