Hoy es el Día del Sexo Anal: todo lo que tenés que saber sobre esta práctica

Cada 18 de abril se celebra el Día del Sexo Anal. Esta práctica, según especialistas, representa uno de los tabús más repetidos dentro del amplio mundo de la sexualidad. A pesar del interés que despierta, el juego anal sigue siendo una de las áreas del placer más incomprendidas y estigmatizadas.

Según un estudio reciente realizado en España el 57% de los encuestados dijo estar explorando el sexo anal o tener curiosidad por probarlo; el 40% aseguró que lo practicó y el 17% mencionó estar dispuesto a intentarlo. Sin embargo, el 30% no quiere probarlo y el 13% no lo repetiría.

Este contraste, destacaron los responsables del sondeo, exhibe que la curiosidad está ahí, pero la vergüenza todavía se interpone en el camino de la exploración abierta y empoderada. Según Elisabeth Neumann, jefa de Investigación de s y sexóloga de la marca de bienestar sexual We-Vibe, “el sexo anal ha estado enterrado durante mucho tiempo bajo la vergüenza y las normas rígidas, no porque sea antinatural, sino porque está fuera de los roles tradicionales”.

Para muchos, el juego anal es intimidante porque rara vez se habla de él de forma inclusiva, informativa y sin estigmas. Al respecto, la especialista enfatizó: “La penetración es sólo una opción. El propio ano está rodeado de terminaciones nerviosas sensibles que pueden ofrecer un intenso placer a través del tacto y la estimulación externos”.

El tabú de la estimulación anal

Estereotipos muy arraigados llevan a muchos hombres a dudar sobre el sexo anal o la estimulación de la próstata. La ausencia de educación sobre las diferentes zonas erógenas conducen a muchas ideas erróneas.

Por ello, no es de extrañar que casi el 29% de los hombres españoles no haya probado nunca el sexo anal y no tenga ningún deseo de hacerlo, según otro informe reciente realizado por We-Vibe. Cuando se les preguntó por qué, la mitad de los hombres 46% en España (y también en todo el mundo) respondieron que simplemente no están interesados en probarlo.

“La estimulación de la próstata suele ser un tema tabú en las relaciones heterosexuales. Y sobre este tema tenemos que aclarar algunos prejuicios. Aunque la zona del ano es muy resistente, debemos también tener en cuenta que tiene unos capilares sanguíneos muy finos que pueden romperse con facilidad, por lo que es muy importante usar siempre lubricante... ¡incluso aunque no nos duela!”, enfatizó Ana Lombardía, experta en bienestar sexual de la compañía.

Sexo anal: secretos y recomendaciones

La psicóloga y sexóloga Mariana Kersz detalló en su libro Un viaje al placer (Urano) una serie de secretos y recomendaciones alrededor del sexo anal. “Tomando las medidas de higiene y prevención adecuadas, esta zona llena de terminaciones nerviosas puede dar una experiencia muy placentera y plausible de generar altos niveles de excitación”, aseguró.

“El tema de la higiene en el sexo anal es esencial. El ano es una zona contaminada por las bacterias de la materia fecal y por más que desde afuera parezca limpio, en el recto pueden quedar restos que contaminen el pene, el dedo o el juguete que quieras introducir”, mencionó.

Para mayor seguridad aconsejó utilizar algún enema “para realizar una limpieza previa al momento de tener relaciones sexuales y así disminuir los riesgos frente a 'accidentes'”. En ese sentido, agregó, primero se puede practicar en soledad con el enema para ver qué se siente y si la situación produce algún tipo de incomodidad.

“Acompañando la higiene, pero también para vencer la resistencia del esfínter, te recomiendo que si estás decidida a tener sexo anal pruebes varias semanas antes: en el baño y con un dedo enjabonado, realizá movimientos circulares ejerciendo presión sobre el ano. Debés practicar todos los días durante varios minutos, para que la zona logre dilatar adecuadamente”, explicó la sexóloga.

En esa línea, agregó que hay que tener en cuenta que la zona en cuestión “está diseñada para expulsar, no para recibir; por lo tanto, el entrenamiento debe ser diario y continuo, pero no tiene que doler”.

“Al cabo de un tiempo no sólo vas a vencer la resistencia del esfínter sino que vas a poder meter una falange o dos sin dificultades”, señaló al tiempo que afirmó que ese es el momento indicado para dar inicio a la práctica.

Por otra parte, Kersz destacó que, lejos de lo que muestra el porno, el sexo anal debe ser realizado con precaución y tomando recaudos. Además de la higiene, resaltó, “es importante que en toda práctica anal se utilice preservativo, ya que pueden contraerse infecciones, porque las delicadas paredes del ano y el recto tienden a lastimarse e irritarse con facilidad, y a través de estas microlesiones las bacterias que habitan la zona pueden desplazarse hacia el torrente sanguíneo”.

Finalmente, a la hora de la primera penetración, aconsejó avanzar de manera lenta pero firme y sin hacer movimientos bruscos (ya sea con un juguete, un pene o un dedo). Además, instó a usar una buena cantidad de lubricante (hay específicos para el sexo anal), ya que esa zona no se dilata sola ni se lubrica naturalmente.