El radicalismo y Cambiemos se doblan, pero no se rompen. Por ahora. La divisiones internas en la UCR son cada vez más amplias a raíz de la decisión del Gobierno de explorar acuerdos territoriales con gobernadores y dirigentes del PJ y de sumar a intendentes bonaerenses. Un ministro, que conoce bien las reglas internas de la UCR, minimiza el conflicto. “Hay dos radicalismos: el que está en el Gobierno y el que está afuera”, sentencia.
Ayer la polémica acompañó al mismísimo presidente Mauricio Macri durante su desembarco en Catamarca, adonde se mostró cerca de Lucía Corpacci, visitante frecuente en la Casa Rosada. La UCR local lo recibió con un comunicado en el que criticó la cercanía a dirigentes que acompañaron al kirchnerismo. “Sería erróneo e inestable el camino de cerrar alianzas con jefes territoriales que hasta hace 7 meses eran abanderados del gobierno que devastó la Argentina", reclamaron.
Cuando el titular del Comité Nacional José Corral asistió a la asunción de las nuevas autoridades partidarias de Catamarca, hace dos semanas, lanzó un dardo que rozó al Presidente. La misma semana había expresado su malestar en una reunión con correligionarios en Tucumán. “La gente sabe que somos honestos y que no tenemos cuentas en Panamá”, dijo en Catamarca. Hablaba del valor de ética radical, pero terminó aludiendo ¿a los Panamá Papers">