window.addEventListener('keydown', function(e) { if(e.key === 'Escape'){ e.preventDefault() } });
Noticias hoy
    En vivo

      La poda secreta que usan los expertos para que la lavanda explote en flores

      • Un truco que activa la floración desde el frío del invierno.
      • Cómo lograr que la lavanda florezca como nunca.

      La poda secreta que usan los expertos para que la lavanda explote en floresUn corte estratégico de tu lavanda en el momento justo puede cambiar todo tu jardín. Foto: Freepik.
      Redacción Clarín

      Tener una planta de lavanda bien florecida es uno de los mayores orgullos para quienes disfrutan del jardín. Sin embargo, no alcanza con regarla cada tanto: hay una técnica clave que los expertos aplican justo cuando el verano empieza a despedirse. Es un corte preciso que se hace en un momento estratégico del año y que, bien hecho, hace que la lavanda se llene de flores, apenas arranca la primavera.

      El truco para podar la lavanda abarca una combinación de cuidados que apuntan a preparar a la planta durante el invierno. La idea es ayudarla a redirigir su energía para que florezca más y mejor. Además de cortar en el momento justo, también se tiene en cuenta el sol, el drenaje y el riego.

      Cómo podar la lavanda en invierno para que florezca más en primavera

      Durante febrero, cuando el clima todavía conserva el aire fresco del verano que se va, es cuando se debe intervenir la planta. El objetivo de esta poda es eliminar las ramas secas y leñosas, recortando hasta un tercio de la lavanda pero sin llegar a la base.

      Con esto se logra una forma más redondeada y aireada, que favorece el crecimiento de nuevas flores.

      Si se poda en este momento, la planta se concentra en florecer en lugar de seguir echando tallos duros. Es una manera de decirle a la lavanda que es hora de florecer”, señalan especialistas en cultivo de plantas aromáticas.

      Una poda de lavanda bien hecha transforma cualquier rincón del jardín en un espacio lleno de aroma y color. Foto: Archivo Clarín. Una poda de lavanda bien hecha transforma cualquier rincón del jardín en un espacio lleno de aroma y color. Foto: Archivo Clarín.

      Cuidados clave de la lavanda: sol directo y riego moderado

      Tan importante como podar bien es asegurarse de que la lavanda reciba sol directo durante varias horas al día. Esta planta ama el calor y necesita al menos seis horas de luz solar diaria para florecer a pleno.

      El truco que usan los expertos combina poda, sol y riego adecuado. Foto: Archivo Clarín. El truco que usan los expertos combina poda, sol y riego adecuado. Foto: Archivo Clarín.

      También hay que tener mucho cuidado con el riego de esta planta aromática: solo se debe regar cuando la tierra esté bien seca, porque el exceso de humedad puede pudrir las raíces.

      Con esta rutina, en pocas semanas vas a notar cómo la lavanda empieza a brotar con fuerza, llena de flores violetas y un aroma que transforma cualquier jardín en un rincón especial. Un truco que parece menor, pero que tiene el poder de cambiar por completo el aspecto de tu espacio verde.


      Mirá también


      Mirá también


      Tags relacionados